El amigo Juan Montes ha encontrado este impagable carnet del Cine Club Junior en el que luce con melena y amplia sonrisa. Que tiempos aquellos y que bonitas presentaciones de películas hacíamos en el salón de actos. Afortunadamente ninguna de ellas grabadas.
Memorables tardes de viernes. Buen cine y posterior borrachera en el Pepito. Tengo un gratísimo recuerdo, como no podía ser menos, de aquello. Un genial Rafa Salinas le prometía al Padre Alcalá en la puerta del salón de actos, a la hora de entrar para ver la peli, que la semana siguiente se sacaría el carné del cine club y que por favor lo dejara pasar. Eso ocurría todos los viernes y nuestro cinéfilo y bondadoso Padre Alcalá lo dejaba pasar siempre. Nunca se sacó el carné.
ResponderEliminarPadre Alcalá está igual que siempre. Lo veo mucho y hablo mucho con él. El otro, después de una primera comunión de un amigo de mi hijo donde él era el oficiante, le di un abrazo y me dijo. ¿Te acuerdas de la canción que cantábamos en misa, "Tus manos son palomas de la paz"?. Y claro, le dije que sí, y de repente, me sorprendía a mi mismo cantando a dúo con el pater en la sacristía del colegio....... Está fenomenal, cuando queráis, organizamos algo a lo que pueda venir. Seguro que viene encantado.
ResponderEliminarDe verdad que no recordaba ser tan gorrón con el cine Club..... me deberían haber vetado la entrada, ¡qué cojones!
ResponderEliminarDudo mucho que ningún otro colegio de la época tuviera un cine club tan bueno como el nuestro, con pelis de Godard, Bergman, David Lean, un lujo, vamos.
Teníamos un colegio que no nos merecíamos....Se admiten críticas a este comentario, of course
Recuerdo que un día Gómez Verástegui quiso aprovechar la oscuridad del cine para meter mano a una niña. Recibió una torta que se escuchó en toda la sala. Rápidamente y si preguntar: ¿quién ha sido?, fue expulsado.
ResponderEliminarQué anécdota más confusa.
ResponderEliminarEs confusa, si, debe haberla escrito alguien de ciencias. Su expresión deja mucho que desear, es más, me aventuraría a decir que debe ser alguien de los de la quedada tras la resaca que debió producirle.
ResponderEliminaryo también recuerdo las tardes de los viernes en el cineclub y los sábados por la mañana en el laboratorio del Padre Alcalá, para intentar sacar mejor nota en física. ¡qué recuerdos!.
ResponderEliminarEva.